Tres fechas del campeonato pusieron a Pablo Bengoechea en la mira de los hinchas de Peñarol. Su salida del Franzini el pasado domingo fue elocuente. Llovieron los insultos de parte de aquellos que lo idolatraron como jugador y que ahora le recriminan que el equipo que conduce técnicamente "no juega a nada".
Los conducidos por Juan Pedro Damiani anunciaron que no se dejarán llevar por los gritos de la tribuna. ¿Pero cuánto más podrán soportar la presión?
En los últimos años los hinchas de Peñarol demostraron perder rápidamente la paciencia con los técnicos de su equipo. Y alcanza con repasar la estadística para darse cuenta de que el desfile de profesionales fue impresionante.
El único que se salva en toda esta problemática es Diego Aguirre que, por su grado de idolatría sumado al hecho de haber sido campeón en 2003 como técnico, cuenta con una valorización especial.
La lista de técnicosFernando Morena (2005)
Uno de los máximos ídolos de la historia del club. Luego de anunciar su retiro modificó su postura y volvió en 2005. Su salida fue traumática porque quedó en medio de la batalla del entonces presidente José Pedro Damiani y el empresario Casal que se llevó a Bueno, Cebolla Rodríguez y Bizera.
Luis Garisto (2006)
Fue un gusto personal de Damiani (padre) que durante muchos años soñó con tener a Garisto sentado en el banco. El club vivía en ese entonces un proceso de recambio. En su pasaje le sacaron 12 puntos a la institución. Las incorporaciones no rindieron y la gente no bancó más.
Mario Saralegui (2005/06, 2007/08 y 2008/09)
Técnicos con carisma y querido por la hinchada. Tuvo tres pasajes. Interino al final de la temporada 2005/2006. Campeón del Clausura 2007/2008 y lo sacaron del cargo en plena pretemporada. Se le recriminó aquella famosa salida de los jugadores a un boliche en la concentración de San José.
Gustavo Matosas (2007)
Matosas fue el técnico del famoso asado por las achuras, como lo definió Juan Pedro Damiani cuando perdió 3-0 en el verano de la temporada 2007/2008. La gente no toleró que en ese partido pusiera juveniles. Le costó carísimo.
Julio Ribas (2009)
Llegó en medio de un gran clima. Los hinchas embanderaron Los Aromos. Pero bastaron pocos partidos para que su particular estilo de plantear el juego comenzara a generar resistencia entre los hinchas.
Víctor Púa (2009)
Llegó despertando simpatía porque era coordinador de las divisiones juveniles cuando lo subieron para sustituir a Ribas. Se prendió en la pelea pero perdió el clásico 3-0 y se le fue el campeonato. Volvió a las formativas.
Manuel Keosseian (2010)
Cargó con la cruz de no ser un hombre de la casa y eso a los efectos de los hinchas tiene un peso especial. Sin embargo, los resultados lo fueron ayudando. Pero planteó un clásico con escasa ambición ofensiva y se fue fustigado por la gente.
Gregorio Pérez (2006/07 y 2011/12)
El hecho de haber sido el técnico campeón del quinquenio lo pone en un pedestal especial entre los hinchas. Se fue y volvió varias veces. En una oportunidad tuvo un cruce con Juan Damiani porque lo sacaron mal del club. Su último pasaje fue para salvar el incendio de la salida de Diego Aguirre. Venía bien hasta que Gunino le cometió penal a Bueno en un clásico que terminó transformando a Recoba en héroe para siempre.
Polilla Da Silva (2012/2013)
Tenía chapa de campeón con Defensor Sporting. El primer dolor de cabeza fue con el golero argentino Bologna. Pero lo respaldo y terminó saliendo campeón. Polilla se fue diciendo que se había cansado de todos los cuestionamientos.
Diego Alonso (2013)
Su nominación causó sorpresa porque realizaba sus primeras armas como entrenador. Su paso por el club duró un suspiro. La gente le perdió la paciencia rápidamente y le llovieron insultos de todos lados.
Jorge Goncalves (2013/2014)
El Tito era el conductor de la Tercera división, asumió como técnico interino, y se quedó en el cargo. Su salida del club fue sumamente curiosa. A una semana del inicio del Clausura le comunicaron con que no trabajaba más.
Jorge Fossati (2014)
Volvió luego de su pasaje en 1996. Se le criticó su idea de jugarse a los veteranos y la gente no toleró que dejara tanto tiempo en cancha a los referentes. Otro aspecto que los hinchas le criticaron fue que hablaba demasiado.
Paolo Montero (2014)
Fue el técnico interino del club en lugar de Fossati. Dijo que se estaba probando. En determinado momento se ilusionó con seguir en el cargo. Pero muchos entendieron que no podía trabajar porque estaba "casado" con Pacheco, Bizera, Zalayeta y Darío Rodríguez debido a su relación de amistad.
Pablo Bengoechea (2015)
Uno de los últimos ídolos de la institución. Tiene un monumento en Los Aromos. Su regreso generó enorme expectativa. Se le "perdonó" el campeonato pasado porque no había armado el plantel. Ahora se le trajo todo lo que pidió. Ganó cuatro de nueve puntos y el domingo se fue insultado por los hinchas del Franzini. Se le critica que el equipo juega poco. ¿Hasta cuándo durará la paciencia con Pablo?
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